La ECI, un proceso de construcción de ciudadanía.
Ramiro Romo es uno de los participantes más activos de la Escuela de Ciudadanía Integral en Salamina, Magdalena, él cuenta cómo este proceso lo ha llevado a involucrarse en la promoción de los derechos de las víctimas en el marco de la Ley 1448 de junio de 2011 y en la veeduría de su municipio, su experiencia nos ayuda a entender la tensión entre teoría y práctica en un proceso como la ECI:
“A través de a ECI pudimos darnos cuenta de lo verdaderamente importante que es hacer veeduría de las gestiones del alcalde y el plan de desarrollo, antes sólo veíamos pasar las cosas; entendimos que vigilar los recursos del Estado es necesario y ayuda a la eficiencia de la administración pública, además la Constitución nos respalda.
Al principio fue difícil porque ni las entidades ni las personas estaban acostumbradas a hacer veeduría y creían que era una manera de hacer oposición al alcalde o que queríamos conseguir plata de la alcaldía, pero cuando vieron que nuestras peticiones estaban fundamentadas en la Ley y que estábamos formados en diversos temas y conformados ante la Personería, las cosas fueron cambiando. Comenzamos presentando derechos de petición bien estructurados sobre la ejecución presupuestal en 2012 y 2013 y para que el alcalde rindiera cuentas de su gestión y así fuimos adquiriendo la información necesaria, antes las solicitudes eran informales a través de cartas o verbalmente y casi nunca eran respondidas.
Nos ayudó mucho el hecho de conformar la veeduría pues de otra manera no hubiéramos podido alcanzar cierto reconocimiento, vivimos en un país de instituciones y hay que aprovechar eso, no es lo mismo ir a título personal a solicitar información o exigir algunas cosas que ir como parte de una instancia amparada por la Ley y con un cúmulo de conocimientos encima. Para pasar de la teoría a la práctica creo que la conformación de la veeduría fue fundamental, claro, ésta no sirve de nada si la gente no ejerce sus funciones y deberes o no conoce sus derechos.
Pero no quería quedarme sólo como veedor, quise aprovechar los conocimientos impartidos en el módulo de derechos humanos y las expectativas que generó la promulgación de la Ley 1448 de junio de 2011 o Ley de víctimas y restitución de tierras para hacer algo por las muchas víctimas, muchas de ellas desamparadas y desconocedoras de sus derechos, que hay en Salamina. Es así como nació la Organización de Víctimas de Salamina – ORVISA -, yo soy el representante legal y la oficina queda en mi casa, a veces me toca hacer de sicólogo escuchando a la gente, pero la mayoría de las veces los orientamos sobre la ruta que deben seguir para exigir sus derechos y la manera de hacerlo.
Creo que en la ECI la idea es meter a nuevas personas para ir posicionándose poco a poco, de modo que estas personas adquieran mayor sentido de pertenencia por su municipio. La CDPBM puede seguir apoyándonos en las gestiones que desde la veeduría estamos haciendo; aunque ya nos apoyó enviando dos comunicados a la alcaldía en los que les pedía ampliar algunos conceptos y una contrapartida para un proyecto que beneficiaría a 50 familias y aunque el alcalde ha mostrado buena tónica, la alcaldía aún no los responde. Todo esto hace parte del proceso ya que los entes públicos desconocen muchas veces los deberes contraídos en el tema de la participación ciudadana.
Por último quisiera decir que me preocupa que en la zona rural el desconocimiento de los deberes y derechos es muy grande, por eso es importante Llevar conformar veedurías en la zona rural o vincular a los de la zona rural a los procesos de la ECI”.
“A través de a ECI pudimos darnos cuenta de lo verdaderamente importante que es hacer veeduría de las gestiones del alcalde y el plan de desarrollo, antes sólo veíamos pasar las cosas; entendimos que vigilar los recursos del Estado es necesario y ayuda a la eficiencia de la administración pública, además la Constitución nos respalda.
Al principio fue difícil porque ni las entidades ni las personas estaban acostumbradas a hacer veeduría y creían que era una manera de hacer oposición al alcalde o que queríamos conseguir plata de la alcaldía, pero cuando vieron que nuestras peticiones estaban fundamentadas en la Ley y que estábamos formados en diversos temas y conformados ante la Personería, las cosas fueron cambiando. Comenzamos presentando derechos de petición bien estructurados sobre la ejecución presupuestal en 2012 y 2013 y para que el alcalde rindiera cuentas de su gestión y así fuimos adquiriendo la información necesaria, antes las solicitudes eran informales a través de cartas o verbalmente y casi nunca eran respondidas.
Nos ayudó mucho el hecho de conformar la veeduría pues de otra manera no hubiéramos podido alcanzar cierto reconocimiento, vivimos en un país de instituciones y hay que aprovechar eso, no es lo mismo ir a título personal a solicitar información o exigir algunas cosas que ir como parte de una instancia amparada por la Ley y con un cúmulo de conocimientos encima. Para pasar de la teoría a la práctica creo que la conformación de la veeduría fue fundamental, claro, ésta no sirve de nada si la gente no ejerce sus funciones y deberes o no conoce sus derechos.
Pero no quería quedarme sólo como veedor, quise aprovechar los conocimientos impartidos en el módulo de derechos humanos y las expectativas que generó la promulgación de la Ley 1448 de junio de 2011 o Ley de víctimas y restitución de tierras para hacer algo por las muchas víctimas, muchas de ellas desamparadas y desconocedoras de sus derechos, que hay en Salamina. Es así como nació la Organización de Víctimas de Salamina – ORVISA -, yo soy el representante legal y la oficina queda en mi casa, a veces me toca hacer de sicólogo escuchando a la gente, pero la mayoría de las veces los orientamos sobre la ruta que deben seguir para exigir sus derechos y la manera de hacerlo.
Creo que en la ECI la idea es meter a nuevas personas para ir posicionándose poco a poco, de modo que estas personas adquieran mayor sentido de pertenencia por su municipio. La CDPBM puede seguir apoyándonos en las gestiones que desde la veeduría estamos haciendo; aunque ya nos apoyó enviando dos comunicados a la alcaldía en los que les pedía ampliar algunos conceptos y una contrapartida para un proyecto que beneficiaría a 50 familias y aunque el alcalde ha mostrado buena tónica, la alcaldía aún no los responde. Todo esto hace parte del proceso ya que los entes públicos desconocen muchas veces los deberes contraídos en el tema de la participación ciudadana.
Por último quisiera decir que me preocupa que en la zona rural el desconocimiento de los deberes y derechos es muy grande, por eso es importante Llevar conformar veedurías en la zona rural o vincular a los de la zona rural a los procesos de la ECI”.